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72 VILLANUEVA DE ALGAIDAS: HORIZONTE DE OLIVAR

martes, 24 de agosto de 2010

Algaidas que es una de estas Villas Nuevas. Villanueva de Algaidas. Segregada de Archidona, moderna aceptación de su independencia, de su particularidad como municipio. Algaidas que fue cuna del maestro Berrocal, Miguel Berrocal, nombre propio de la escultura internacional en el siglo XX. Algaidas, cuyo nombre desciende del árabe y que tiene eco de matorral y de monte bajo. Villanueva de Algaidas, de origen conventual y ascético. Algaidas de olivos y olivos y olivos y olivos, de aceite dorada que la ha transformado en el mayor productor de este oro líquido en toda la provincia de Málaga. Villanueva de Algaidas, Algaidas, villa nueva.

La lejanía, de olivos

Los olivos callados, silenciosos, aprietan sus sarmientos necesarios contra la tierra, conformando un mar boscoso de verdes plateados. Las ondulaciones de los cerros colmados no permiten ver la tierra rojiza, de colores intensos, que palpita bajo nuestros pies. Aquí y allá se observa la polvareda que tractores y maquinaria levantan en su tránsito por los caminos y las pistas. Se levantan como insectos metálicos las torres donde se almacena el cereal y la aceituna, plantaciones para el tratamiento del aceite que se asemejan a bases lunares sobre un mar verde. El aire se colma de ese olor fuerte y ligeramente dulzón que desprende el prensado de la oliva, un perfume que nos habla de potentes industrias aceiteras, de refinos de oliva, de dorados y untuosos líquidos. Se levantan la calima y el polvo suspendido en el aire más allá del horizonte, haciendo que todo el paisaje tenga un aire irreal, onírico, de sueños en la lejanía.

Situación

Seguimos dirección centro urbano para encontrarnos con un trazado lineal pero que esconde algunas revueltas en el interior de sus calles. Tomamos calle Málaga y calle Córdoba, donde estacionamos. Villanueva de Algaidas y su vecina Villanueva de Tapia se encuentran prácticamente en la frontera de la provincia malagueña, compartiendo lindes con Córdoba, así que estacionar en la intersección de estas dos calles es como reproducir a escala reducida una realidad más amplia. Contemplamos en seguida las casas de amplios zaguanes, de patios umbríos que se dejan entrever tras las gruesas puertas de madera. Colegimos que los inviernos resultarán recios en esta comarca nororiental de la provincia, inviernos de rocío y de helada, de temperaturas mínimas en la madrugada y en la primera mañana que irán ascendiendo según ascienda el sol. Las casas, algunas de fachada señorial, tienen un máximo de dos alturas, muchas de ellas con una tercera altura que responde a un desván, a un altillo que en tiempos pretéritos se utilizaba como almacén de grano familiar y que en la actualidad ha perdido su uso. Las ventanas y puertas enrejadas con forja negra. Las sombras de las casas se proyectan unas sobre otras, permitiéndonos permanecer de manera permanente al abrigo de la sombra, que nos alivia del sol impenitente que ya acucia en lo alto.

Origen y parroquia

Si en otros lugares la gestación de una población se producía en torno a una fortaleza de defensa, a una torre o un castillo, Villanueva de Algaidas comenzó su andadura moderna al arropo de un conventos franciscano. Tan es así que en el centro urbano, los edificios religiosos se reducen en la actualidad a una iglesia de moderna construcción y relativamente humilde. Como apunta el Patronato de Turismo de la Costa del Sol en su página web, dicho convento franciscano “aglutinó en sus alrededores varios incipientes núcleos que, con el tiempo, requirieron de una organización que necesariamente debía canalizar una casa consistorial que arbitrara los intereses de esos núcleos dispersos en lo que entonces se llamaba la Rinconá. A poco más de un kilómetro del actual casco urbano se ubicaba el núcleo de la primera villa, lugar que hoy se conoce con el nombre de La Atalaya, amén de otros barrios que fueron surgiendo junto a las zonas más propicias para un determinado tipo de cultivo. La Atalaya, la Rinconá, Zamarra, Albaicín y Parrilla son algunos de esos barrios que acabaron por conformar el actual pueblo de Villanueva de Algaidas, cuyo Ayuntamiento quedó constituido en 1843, después de segregarse de Archidona”. Asi pues, dirigimos nuestros pasos hacia la parroquia de Nuestra Señora de la Consolación que comenzó a construirse en el año 1904 y se terminó en 1907. Su portada es sencilla, de blanco inmaculado con ribetes de amarillo albero, que culmina en una sencilla espadaña de un solo ojo del que pende una campana. Posee una sola nave y su fachada fue reconstruida parcialmente en el siglo XX. La puerta de la sacristía pertenece al antiguo convento franciscano. El templo está integrado entre las casas de la misma calle como si se tratara de un edificio más. En su fachada luce dos leyendas que dicen “Dichosos los que trabajan por la paz fruto de la justicia” y “Que tu palabra, Señor, cambie mi vida”. Es un templo breve, pequeño, pero activo en el culto, dado el programa de misas y actividades dado el programa que podemos leer colocado en su tablón de anuncios.

Miguel Berrocal, escultor

Desandamos los pasos andados, al caminar por las calles nos topamos con un hombre que canta una copla en voz baja apoyado en el quicio de su puerta. Vemos algunas casas solemnes, de cierta trascendencia, y que podríamos situar en el siglo XVIII. Las persianas de madera se desenrollan y protegen del sol el interior de las casas, sirviendo de alivio al permitir pasar las delicadas corrientes de aire. Caminamos hasta la plaza Miguel Berrocal, centro neurálgico de VVAA de Algaidas y recuerdo al que fuera una de los más destacados escultores del siglo XX, cuya obra rebasó las inmediaciones del municipio y de la provincia para convertirse en patrimonio internacional. La página web Escultura Urbana ofrece un breve semblante del artista: “Miguel Ortiz Berrocal, Miguel Berrocal, para el mundo artístico, nace el 28 de septiembre de 1933 en Villanueva de Algaidas, provincia de Málaga. Se traslada en 1949 a Madrid, donde cursa un año en la Facultad de Ciencias Exactas, para su ingreso en la Escuela de Arquitectura. Abandona sus recién iniciados estudios de arquitectura para estudiar en la Escuela de Artes y Oficios y, posteriormente y como alumno de Ángel Ferrant, en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en Madrid. Becado por el Gobiernos francés, reside en París, donde traba amistad con Giacometti, Cárdenas y Picasso en Cannes. En una primera etapa, e influido por la obra de Eduardo Chillida y Jorge Oteiza, Berrocal realiza piezas en hierro forjado hasta que, a principios de los años sesenta comienza a realizar sus conocidas esculturas "desmontables", que tanta fama de darían. Son obra de pequeño formato realizadas en materiales nobles, pero gracias a su conocimiento sobre nuevos materiales como el kevlar o la fibra de carbono, Berrocal comienza a realizar obra de gran formato. Reside en las ciudades italianas de Roma y Verona hasta su retorno definitivo a Villanueva de Algaidas, donde fallece el 1 de junio de 2006”. La página web oficial Berrocal.net ofrece una extensa información de la vida u obra del autor, así como una muestra de su amplio catálogo artístico.

El convento y la iglesia rupestre

Regresamos al lugar donde hemos estacionado el coche con la intención de visitar el origen de Villanueva de Algaidas. Descendemos pro la calle Córdoba hasta una intersección, tomamos la vía de la izquierda sobre la que se nos indica “La Atalaya”, núcleo poblacional posible origen de Villanueva. En el camino encontraremos los restos del convento franciscano. El recinto está vallado y cerrado, pero desde el exterior se pueden apreciar y ver las formas perfectamente definidas del edificio. Además cuenta con un panel informativo en el que se detalla la historia, origen y construcción del convento. De lo que fuera este magnífico templo tan sólo quedan sus ruinas en las que se puede apreciar la nave de la iglesia y parte de la estructura de los que fuera residencia de los monjes franciscanos. El convento fue inaugurado en 1566 por el primer Duque de Osuna, Pedro Téllez de Girón, convirtiéndose en referente religioso de los pobladores de la zona. Los avatares históricos llevaron a su abandono, lo que ha ocasionado el derrumbe de parte de su estructura. Como curiosidad, señalar que los monjes franciscanos que lo habitaron vivían, en parte, de la venta de madera que extraían de las encinas próximas a la Armada Española. Junto a los restos del convento se encuentra la que fuera antigua ermita rupestre. Datada en el siglo IX, dio cobijo al culto del grupo de mozárabes, cristianos resistentes a la dominación árabe. Se trata de pequeñas cuevas excavadas en la roca, con una nave central con bóveda de cañón. Junto a ellas hay pequeñas salas laterales. Estas ermitas indican que en esta zona debió haber una importante población cristiana.

Despedida

Atrás dejamos los restos de este resplandeciente pasado para zambullirnos en el resplandeciente presente de olivos verdes, donde el gris plateado de sus copas se mece con la cálida brisa del estío. Se pierde el coche entre las curvas, carretera sinuosa, y se sumerge en el olivar, confundiéndose con la tierra rojiza, con el verde ceniciento, con el gris plateado. Somos también aceite.

Enlaces de interés

Miguel Berrocal: Sin duda, la página web oficial del artista Berrocal.net nos ayudará a tener un mejor conocimiento de la trayectoria internacional de este escultor que se codeó con los grandes nombres del arte en el siglo XX llegando a formar parte de ellos. Escogió además Berrocal su localidad natal de Villanueva de Algaidas para pasar sus últimos días, dejando atrás Verona para contemplar los olivos terrenos de su patria chica.
Senderismo: Por Villlanueva de Algaidas, lindante al convento franciscaso discurre el sendero de Gran Recorrido 7 – E4. El GR-7 es un Sendero de Gran Recorrido que parte de Andorra al estrecho de Gibraltar. Como sendero de gran recorrido está balizado con señales rojas y blancas. Se trata del primer sendero de gran recorrido que se señalizó en España (se inició en el 1974); tiene un recorrido que sigue el levante peninsular desde una situación retirada de la costa. Forma parte del sendero europeo E-4 (Tarifa-España); después de cruzar Francia y Andorra (en los dos países también tiene la referencia de GR 7), entra en Cataluña por La Farga de Moles, cruza esta comunidad y continúa por la Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía hasta llegar al cabo de Tarifa, cerca de Algeciras, donde acaba su recorrido y en su día se encontrará con el GR-92.
Enlaces de interés: Tomamos como referencia la página web del Patronato de Turismo de la Costa del Sol y la página web municipal de Villanueva de Algaidas.

Este blog queda abierto a los comentarios, anotaciones, opiniones que los navegantes deseen realizar. Nos vemos en El Color Azul del Cielo.

2 comentarios:

Begoña dijo...

¡Que bonitos los olivos!como me gustan.

Nekane dijo...

HAY DE TODO EN LOS PUEBLOS DE MÁLAGA.¡Qué sorpresa Berrocal!
Me parece curioso lo de ¿colegir? lo de las heladas y el frío en los atardeceres y noches de invierno.
Y ese parquecito tan sencillo,íntimo y recoleto.PAZ Y SERENIDAD.Ahí parece que no puede llegar el estrés.
UN abrazo,Israel.Sigue guiándonos.